El día 5 de diciembre del 2009 llevamos a cabo una de las actividades tradicionales del Club: llevar un poco de tradición y diversión a personas que están en tratamiento contra adiciones y que actualmente viven en las instalaciones de la fundación Renace.
Cunado terminaron, nos ayudaron a colocar el telón para la pastorela. Todo quedo listo y Adal, nuestro presidente, inicio la función. Hubo de todo: tropiezos, risas y buenos momentos, eso si, no hay que olvidar al angelito rosado que con sus polvos mágicos provocó la risa de la audiencia. Al finalizar la pastorela realizamos la tradicional pedida de posada; en la que fue sorprendente ver, que a pesar de la apatía de algunos, se contagiaron del amino de los demás y terminaron cantando con ánimo.
Claro, no podía faltar la tradicional piñata, donde la vergüenza no impidió, que todos se aventaran como niños a recoger los dulces. Ya después de la piñata, tamalitos y atole para todos.
Claro, no podía faltar la tradicional piñata, donde la vergüenza no impidió, que todos se aventaran como niños a recoger los dulces. Ya después de la piñata, tamalitos y atole para todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario